Es una de las playas más hermosas de Brasil y ha cobrado una gran popularidad gracias a quienes construyeron el condominio Outeiro das Brisas. Pero actualmente aparecen instalados allí no solamente quienes pertenecen al complejo privado, sino también, otras opciones de alojamiento como la Enseada do Espelho, Pousada do Baiano y Fazenda Calá. En realidad este impulso turístico no es gratuito, puesto que Praia do Espelho es una playa de las más atractivas en Brasil. De cualquier manera sigue siendo un lugar más bien rústico, ya que todavía no existen allí cajeros electrónicos, teléfonos públicos o grandes almacenes. La terminal aérea más cercana es la de Porto Seguro.
Praia do Espelho, es una magnífica playa cuya denominación original era Arao, el apellido del patriarca de las familias de pescadores que habitaron el lugar, antes de que fuera lanzado como un destino turístico. Es una playa que deslumbra por sus características silvestres, por ejemplo, su gran palmeral que contrastan con la seca arena que corre de manera paralela al apacible y cristalino mar. Este último forma numerosas albercas naturales.
Aunado a lo anterior, un riachuelo de color verde tiene su desembocadura en la zona derecha de la playa, lo cual produce una imagen que parece extraída de una postal o un folleto de tours, por su espectacular proyección.
Qué visitar en Praia do Espelho
Pero los atractivos de Praia do Espelho no se terminan con lo anterior, ya que los cocoteros se entremezclan con los célebres bares costeros donde se pueden degustar deliciosas caipiroskas y caipirinhas. Las escasas posadas que se encuentran en Espelho, se llenan por completo en la temporada festiva de los brasileños conocida como Reveillon y en Carnaval. Por este motivo, una buena sugerencia es reservar el alojamiento con la suficiente antelación.
Las posadas más convenientes de utilizar, para quienes visiten esta playa brasileña son las de Porto Espelho, Recanto do Espelho o la Pousada do Baiano. Por otra parte, una de las diversiones más disfrutables que se pueden tomar en Praia do Espelho, es dar paseos por la costa de la playa. Cuando hay marea baja es factible rodear las rocas de la zona izquierda de la playa y hallar otras dos excelentes playas: Praia dos Amores y Outeiro. Las aguas de la primera de estas playas son tal vez más azules que las de Espelho y por lo que se refiere a la segunda, es muy agradable para pasar la tarde.
Praia do Espelho es una de las playas que más aparecen mencionadas en las listas de los sitios costeros más interesantes de Brasil para fines turísticos. Es importante mencionar que Brasil tiene unas 2,000 playas ubicadas en más de 7, mil kilómetros de litorales marítimos. Muchas de estas playas poseen una extraordinaria belleza natural. Definitivamente Praia do Espelho, con sus albercas naturales, su densa vegetación y sus soberbios acantilados, es una referencia ineludible para los viajeros interesados en conocer las mejores playas de Brasil.
Cómo llegar a Praia do Espelho
Arraial d’Ajuda se localiza al sur del estado de Bahia, a unos 730 kilómetros de Salvador y a 1130 kilómetros de Rio. Si se planea ir por vía aérea, hay que considerar que el aeropuerto más próximo es el que se encuentra en Porto Seguro.
Información acerca de Praia do Espelho
Buena parte de los atractivos naturales que hacen tan destacable a Praia do Espelho, se hacen presentes de igual manera en las playas cercanas: como las de Trancoso, Caraíva o Arraial d’Ajuda. No obstante lo que distingue a Praia do Espelho de las demás, es que cuenta con las mejores cualidades de las demás playas, pero concentradas en una sola.
Actividades a realizar en Praia do Espelho
Imposible no recomendar como una de las características más destacables de Praia do Espelho, sus interesantes arrecifes, los cuales hacen surgir varias albercas naturales. Son espejos de agua que casi siempre le dan al mar una tonalidad turquesa que es más complicado hallar en las playas cercanas mencionadas anteriormente.
Pero junto con estas albercas naturales, lo más interesante del destino brasileño que les recomendamos son sus blancos acantilados, la arena clara, y sus bosques de palmeras, altos cocoteros a la orilla del mar, con la bella ensenada al lado norte protegida por un impresionante muro de roca, que casi toca el mar.
