¿A poco no estás cansado de ver un día tras otro de manera rutinaria y aburrida?
Es tu decisión si lo único que quieres ver son cuatro paredes de una oficina, o vivir todo el tiempo encerrado en tu habitación. También puedes decidirte por darle a tu mente un respiro y darle a tus ojos el privilegio de conocer las mejores vistas del mundo, te mostramos a continuación algunas sugerencias para una mirada diferente
Five Fingers
En los Alpes Austriacos se encuentra esta plataforma que parecería ser una mano gracias a su construcción que consta de una altura de 2.108 metros, con una caída de 400 metros, en cada uno de sus segmentos se encuentra alguna peculiaridad. Por ejemplo, la primera división cuenta con un marco para la vista panorámica para aquellos que quieran retratarse junto al abismo.
La segunda división cuenta con un suelo de cristal para los aventureros que no le temen a las alturas, el tercero representa la libertar a través de un trampolín que obviamente está negado al público, el cuarto también tiene un marco pero de cristal y el último posee un telescopio
Top of Tirol
También hay opciones para los que disfrutan del frío, este mirador tiene una altura de 3165 metros por encima del nivel del mar sobre el glaciar de Stubai. La peculiaridad de este sitio radica en la volatidad que presenta fuera de la cima, pues está construída con vigas de acero contando con más de nueve metros al aire. No puedes perderte la experiencia de contemplar el panorama con mas de 109 picos de diferentes montañas que lo rodean.
Ornesvingen
Si te gustan las caminatas, y como ya lo dijimos: estás harto de la rutina, O rnesvingen es la mejor opción para viajeros como tú, que gustan de un gran descanso en medio de sus hermosas vistas para hacer un alto en su camino. Sin perderse por supuesto de un gran paisaje natural conocido cómo: las ???Siete hermanas y el pretendiente???.
Como queda claro, las opciones siempre van a aparecer de acuerdo a tus posibilidades y tus necesidades. Lo que sí hay que resaltar es que cada viaje, cada pausa, cada inhalación de un ambiente distinto siempre hace que regresemos con otro tinte, con mayor espacio en los pulmones y mayor calma para proseguir con la prisa que exige la vida moderna.
